Esclavo Sexual - Capitulo 02

Historia Información
un hombre joven continua con su servidumbre.
1k palabras
5
1.4k
00

Parte 2 de la serie de 5 partes

Actualizado 06/10/2023
Creado 01/23/2021
Compartir este Historia

Tamaño de fuente

Tamaño de Fuente Predeterminado

Espaciado de fuentes

Espaciado de Fuente Predeterminado

Cara de fuente

Cara de Fuente Predeterminada

Tema de Lectura

Tema Predeterminado (Blanco)
Necesitas Iniciar sesión o Registrarse para que su personalización se guarde en su perfil de Literotica.
BETA PÚBLICA

Nota: Puede cambiar el tamaño de la fuente, el tipo de fuente y activar el modo oscuro haciendo clic en la pestaña del ícono "A" en el Cuadro de información de la historia.

Puede volver temporalmente a una experiencia Classic Literotica® durante nuestras pruebas Beta públicas en curso. Considere dejar comentarios sobre los problemas que experimenta o sugerir mejoras.

Haga clic aquí

Como la semana pasó y el sábado próximo vino más cerca mis sentimientos de pavor crecieron. Sin embargo, también tuve sentimientos de emociones fuertes. Pensé que debo evitarlos pero sabia que iría a ver Luisa y Juan otra vez.

El viernes recibí un correo electrónico. Dijo que cuando llego a su casa la puerta va a estar desbloqueada. Debo entrar, quitarme la ropa, y ducharme en la ducha al aire libre. En el gabinete al lado de la ducha seria la ropa para llevar.

Era como dijeron. Juan y Luisa estuvieron sentado en la patio cuando llegué. Me miraron mientras seguí sus instrucciones. Después me duché abrí la gabinete y vi los artículos de ropa para mí.

Había chaparreras de cuero, un collar, y también un tapón que pareció ser para mi culo. Una jarra de lubricante estaba allí. Le metí el tapón en la jarra y lo inserté en mi ano. Me quedó bien, y mi culo apretó alrededor el tapón. Me puse las otras cosas y caminé a Juan y Luisa.

Luisa dijo, "Te ves bien. Barre el patio mientras esperamos por nuestro invitado para llegar".

No supe a quién se refirió. Pero recogí la escoba y con mi culo expuesto y el tapón en mi ano, comencé limpiando el patio mientras ellos me miraron. En pocos minutos oí un voz, y un hombre muy alto y muscular entró el patio. Fue un negro, mas de 190 cm y probablemente pesó 110 kg. Miró a mi y dijo,

"¿Él es nuestro juguete nuevo? Pienso que va a estar muy entreteniendo."

Luisa y Juan saludaron el hombre con entusiasmo. Los oí llamarlo Rodrigo y hablaron con muchas miradas a mí, y me hizo nervioso. Mi ano agarró el tapón con fuerza y cuando me atreví mirar a ellos vi que ellos habían quitado toda de su ropa. La tetas de mi ama estaban reluciendo con sudor, y las pollas de ambos hombres estaban erguidas. Luisa me llamó para venir más cerca y me dijo para acostarme atreves su regazo. Yo cumplí y ella acarició mi culo y jugó con el tapón, meneando y jalando de él. Entonces me dijo para contar a diez y con cada numero golpeó a mi culo con una mano abierta. Los hombres miraron con anticipación y pollas duras. Cuando ella terminó con la zurra, dijo a los hombres, "Vamos. Traed la puta al sótano."

Sujetaron una correa a mi collar y cubrieron mis ojos con una venda. Traté de seguirlos sin caerme y tuve una mano en el hombro de uno de los hombres. Entramos en la casa y descendieron las escaleras hasta el sótano. Olió a humedad, y no pude ver nada. Me guiaron a un banco con mi culo arriba y mi cabeza colgando sobre el borde. Luisa me ordenó para contar otra vez y me dio los golpes como antes en mi culo. Mi piel sintió doloroso y crudo.

Ella dijo, "Me gusta las mejillas rojas tiene. Ahora hombres, podéis tenerlos."

Alguien jaló a mi pelo y levantó mi cabeza. Olí el sudor de él y pensé que no fue Juan, el olor estaba diferente de su. Tuve razón, porque cuando sentí la cabeza de una polla a mis labios y abrí mi boca, el tamaño era much más grande que su. Rodrigo estaba follando mi boca con una verga de mas de 25 cm, y muy grueso. A veces sostuvo mi nariz cerrado hasta ahogue. Me volteó sobre mi espalda, escupió en mi boca abierta y continuó llenando mi garganta con su salchicha enorme. Sus huevos rebotó contra mis ojos cubiertos y pellizcó mis tetas con fuerza. Yo estaba ahogando con saliva y polla.

Sentí las manos de Luisa a mi culo. Jaló el tapón desde mí y dijo a Juan, "Abre su culo con tu verga antes Rodrigo comienza taladrando allí con su serpiente grande." Inmediatamente puso su polla a mi entrada y empujó adentro de mí. Me follaron con fuerza en mi boca y ano. Admito, yo estaba disfrutando la sensación del abuso. Mi polla estaba dura y el fluido seminal estaba goteando. Rodrigo agarró mi cuello y movió su polla adentro y afuera, y Juan agarró mis piernas mientras me folló. Juan paró y dijo, "Cambiemos. No quiero correr demasiado temprano."

Me dijeron levantarme. Rodrigo sentó en el banco, su polla arriba y lista. Senté encima de él con su polla grande a mi hoyo. La venda había caído de mi ojos y vi Luisa aplicando lubricante en mi culo y la verga de Rodrigo. Con facilidad fue adentro de mí y pronto tuve todos los 25 cm en mi canal. Me sentí tan lleno, y cuando Rodrigo comenzó moviendo jaló a mí contra su pecho y me abrazó con fuerza. Susurró en mi oreja, "Espera puta, tenemos más para ti."

Juan estaba parada atrás de nosotros en posición perfecta para hacer una penetración doble. No supe era posible pero me sentí la cabeza de una otra polla empujando contra mi pobre culo. Logró la entrada y yo estaba estirado hasta el limite. Comenzaron follando en ritmo y con cada empujón gemí con placer y dolor. Luisa estaba mirando al abuso con deleite. Me pregunté qué ella tenía en mente hacerme cuando los hombres terminaron.

Rodrigo dijo, "estoy listo para correr". Juan me sacó del banco y me puso en rodillas. Ambos hombres estaban de pie a mi cara masturbando. Corrieron como una manguera y la leche rociado en mi pelo, ojos, nariz, y boca. Luisa dijo, "No toques, deja la leche en tu cara y regresa al banco en la espalda."

Yo cumplí. Ella se acostó mi cabeza cubierta con leche y jaló abajo contra mi boca, gimiendo. No pude respirar mientras ella trabajó para ganar un orgasmo. Tuve suerte, ella corrió rápidamente antes yo ahogué. Mi cara estaba cubierto con ambos leche y jugo de coño. Luego, ella puso el tapón de nuevo en mí.

Me dijo, "Corre ahora. Puedes tener 10 caricias, si no corres para entonces, debes dejar de tocarse a sí mismo inmediatamente."

Corrí en ocho. Mi leche salpicó contra mi estomago. Luisa lo limpió y lo difundió en mi cara con el resto. Me dijo para duchar y continuar con el trabajo exterior. Fui afuera, me duché, y me lavé todo la leche de los hombres y jugo de Luisa de mi cuerpo. Luego, continué con el trabajo hasta Luisa me dijo para salir. Me dijo que debo regresar el sábado proximo a la misma hora.

Me pregunté que planes tuvieron para mí en el futuro.

Por favor califica esto historia
El autor agradecería tus comentarios.
  • COMENTARIOS
Anonymous
Our Comments Policy is available in the Lit FAQ
Postear como:
Comparte esta Historia

historia ETIQUETAS

LEER MÁS DE ESTA SERIE

SIMILARES Historias

Alaska A story of two friends.
Finally Meeting Ch. 01 A gay male story.
Farm Boi Life Ch. 01 Ryan's job expands.
I Blame It on the Roommate A chance encounter leads to my mouth getting fucked.
Scott and Connor Ch. 01 Freshman begins sexual journey with a senior frat brother.
Más Historias