Esos No Son Cachos

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¿Una "inocente" paja rusa se puede considerar infidelidad?
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Parte 41 de la serie de 46 partes

Actualizado 09/07/2023
Creado 08/08/2023
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- No son cachos si no me la metes

Esa fue la frase que dio comienzo a un viaje de ida.

---

Desde que tengo memoria, me encanta mamar. No sé si sea una fijación o algún problema psicológico, pero la verdad no me interesa ni siquiera tratarlo con mi psicoanalista porque es algo que disfruto plenamente y en ocasiones me llega a excitar muchísimo más que una penetración.

Nunca he sido una diva de cuerpo perfecto, no creo que sea posible con el par de senos grandes que me regaló el señor, justos para usar como carnada y terminar haciendo lo que más me gusta.

Aprendí a lucirlos bien, llevar un buen sostén que los mantenga en su sitio y un sugerente escote que no muestre demasiado, solo lo suficiente para antojar.

---

En el trabajo me asignaron una nueva área para hacer el proceso de ventas. En una de esas visitas fue que conocí a Erick, un delicioso extranjero que había decidido emprender en nuestro país montando una planta de producción.

Él día que tuvimos la primera visita de negocios, no más entrar a su oficina y sentir su perfume me hizo tambalear, pero cuando se levantó y vi su envergadura y porte de inmediato sentí la humedad en mis tangas.

Me dio un gran apretón de manos e imagine esa misma fuerza aplicada en mi cuello «ay dios, ¿qué me pasa?». Ahí va la segunda oleada, me empezaba a preocupar que esa humedad no terminará bajando por mis muslos y apreté las piernas.

Me hizo pasar y caballerosamente me corrió la silla. Le dio la vuelta al escritorio, se sentó con la espalda recta, se acomodó los puños de la camisa, organizando las mancuernas.

- ¿Cuéntame en qué te puedo ayudar?

«Ay dios mío, si le dijera» pensé para mis adentros y sonreí imaginando mil cosas en ese escritorio mientras sacaba la tableta con el catálogo.

Estaba super nerviosa, se me iban las palabras con algo que hago día a día y me sale super natural. Se me iban las palabras y no era capaz de dejar de pensar mil cosas con él.

Al parecer se dio cuenta, tomo la tableta en sus manos, se recostó en el espaldar y mientras yo trataba de conectar palabras, él pasaba las imágenes en la tableta.

- Esta parte me interesa

Se inclinó para mostrarme el servicio de distribución de repuestos a domicilio y emergencias 24 horas.

Yo me incliné hacia adelante y sin querer apoyé uno de mis senos en el escritorio y no me di cuenta que se soltó uno de mis botones.

Él hombre trató de disimular, pero le fue imposible no dar una mirada rápida porque una de la areola se asomaba tímidamente por el encaje. Carraspeo, tirándose hacia atrás y miró hacia otro lado.

- Señorita, su camisa está...

- Ay --me apure a cerrarla-- que pena con usted

La conversación transcurrió después de eso con normalidad y terminamos cerrando un contrato de prueba por 2 meses y dependiendo del resultado, hacíamos un contrato por renovaciones anuales.

---

Culminado el tiempo de prueba agendamos una reunión para revisar los resultados. Debido a que su agenda estaba bastante apretada acepté hacer la reunión en horario fuera de oficina.

A las 7 de la noche en punto estaba allí. Desde medio día había pedido permiso para ausentarme. Sesión completa de belleza, me fui a comprar ropa interior nueva y luego a mi casa a vestirme hermosa para él.

---

Esperaba que a esa hora estuviera solo, pero cuando llegué me tocó esperar por casi una hora.

Lo veía ir y venir en la sala de reuniones a través de los vidrios, volteaba a mirarme y luego levantaba su muñeca para ver su reloj. Se le notaba que estaba preocupado por mí.

Se disculpó y salió en dirección a mí. Ahí va mi corazón de nuevo queriendo salir de mi pecho.

- Esperanza, que vergüenza con vos, pero esta reunión se alargó más de lo que esperaba ¿te queda fácil reunirnos mañana?

Obvio que si podía, pero por nada del mundo iba a perder todo el esfuerzo que hice.

- Si un poco difícil, porque ya tengo cita programada con otros clientes, pero yo lo espero no hay problema

Volteo a mirar a la sala de juntas, se colocó la mano en el mentón pensativo.

- ¿Sabe qué? Aprovechemos de una vez, así también cambiamos de tema

Me ayudó a levantar tomándome de la mano y un corrientazo me recorrió todo el cuerpo. Me invitó a entrar y me presentó con los otros miembros de la junta directiva.

- ¿Tienes la presentación con las métricas?

- Si señor

Saqué una USB de mi bolso y se la pasé. El conecto el dispositivo, abrió la presentación y apagó las luces.

- Ella es esperanza, la persona encargada del nuevo proceso de delivery and maintenance

Con los nervios de punta empecé a mostrarle las métricas y adicional otras proyectadas como venta cruzada si tomaban otros productos.

Las preguntas iban y venían y afortunadamente ya me había preparado para varias de ellas. Lo que no me esperaba era verlo detrás de la luz del proyector clavándome los ojos de esa forma.

Ahí va mi entrepierna haciendo de las suyas. Apreté mis muslos para evitar cualquier accidente y fue peor, mi sexo palpitaba como si tuviera un vibrador.

No podía ser peor momento para que a mi mente le diera por imaginarme desnuda en medio de esa mesa en cuatro y el fallándome durísimo y dándome nalgadas mientras los otros accionistas lo veían.

Sabía que alguien me estaba hablando, pero no entendía ni una palabra de lo que me decía, solo veía de reojo que gesticulaba, pero no era capaz de dejar de verlo a Erick.

Me sacudí la cabeza, miré al hombre a los ojos.

- ¿Qué pena? ¿me puede repetir la pregunta?

- Claro. Que si... blah blah blah blah

El corazón estaba que se me salía. Erick caminó a mi lado y señaló la pantalla mostrando las gráficas.

- Acá claramente muestra que ha sido una buena inversión y optimización de procesos

Me salvó la vida y hasta termino de hacer mi trabajo convenciéndolos de adquirir los otros servicios adicionales.

El mismo hombre quería seguir con la cháchara y preguntas, pero ya todos estaban demasiado cansados como para seguirle la corriente. Dieron el visto bueno para renovar el contrato por un plazo mayor y pidieron atender los otros temas la siguiente semana.

Varios de ellos pasaron a despedirse de mano y me sorprendió como una mujer madura se despedía de beso en la mejilla mientras sus ojos se perdían en mi escote.

Erick, levanto el teléfono de la sala de conferencias...

- Ya esta tarde, le voy a pedir a mi chofer que te lleve

- Tranquilo no hay problema, yo vine en mi carro --saqué de mi bolso unos papeles-- igual nos falta firmar esto

Me salí de la sala de reuniones y me senté en la sala de espera. Su secretaria ya se había ido.

Hablaron otro poco más ahí de pie, finiquitando asuntos y finalmente estrecharon sus manos y se despidieron.

Erick se acercó hacia mí, caballerosamente me ayudó a levantar y nos dirigimos a su oficina. Corriendo la silla para acomodarme y luego dar la vuelta a su escritorio. Se sentó apoyándose en el espaldar, soltando un gran suspiro.

- Ufff este día estuvo complicado, afortunadamente ya se va a terminar

- Ni me lo digas, tenía los nervios de punta, no me esperaba tener que presentar estos datos con tantas personas

- Uy que vergüenza con vos y yo que te tire a la jaula de los leones sin preguntarte

- No se preocupe que esos sustos son buenos pal corazón, lo ponen a latir fuerte

Inconscientemente enderecé mi espalda, mi escoté se abrió un poco y él no pudo evitar darle una mirada. Trato de disimular, abriendo el cajón para sacar una pluma.

- ¿Dónde firmo?

Moví los papeles hacia adelante y me incliné para señalar con la punta del dedo.

Él colocó la pluma sobre el papel y tras dibujar el primer garabato sus ojos se desviaron hacia mis senos que colgaban y se le fue el trazo por fuera.

- No sé qué me pasa, debe ser el cansancio

- No se preocupe, siempre traigo una copia

Acá vamos, me levanté para darle la espalda, o más bien una vista perfecta de mis nalgas. Me incliné hacia adelante y mientras sacaba los papeles miré de reojo. Ahí estaba sumergido y embobado entre esa figura de corazón.

- Aca están

Me di la vuelta descargando los papeles y me incliné para pasar las hojas, de esa forma era aún más prominente mi escote y ya no pudo evitar mirarlos. Levantó su mirada y se sonrojó cuando le sonreí.

- Discúlpame, yo no...

- No se preocupe, no me molesta

Me incliné aún más cerca y señalé con mi índice la línea punteada. El bajo la mirada.

- Cuidado que no traje más --dije en tono de broma--

Descargo la pluma a un lado. Colocó sus manos boca abajo contra el escritorio y respiro profundo. Me levanté y me crucé de brazos.

- Así te puedes concentrar mejor

- Si mejor, te lo agradezco --dibujando una leve sonrisa--

Ambos nos reímos y trazo la firma en ambas hojas sin inconvenientes. Esperó a que se secara la tinta, junto los papeles y los organizó golpeando la parte inferior contra la mesa.

Me los entregó mirándome fijo a los ojos y cuando yo los tomé, no los soltó creando un poco de tensión.

- ¿Algún problema? --le pregunté--

- No, ninguno

Se sonrió, mirando provocativamente. Volteo la mirada a un portarretratos en su escritorio, soltó las hojas y me quitó la mirada de encima.

Me di la vuelta, guardé los papeles del contrato. Ese juego no me lo estaba inventando, o hacia la movida y me arriesgaba o me arrepentía toda la vida por no hacerlo.

Tiré los hombros hacia atrás para hacer más prominente mi escote, luego me di la vuelta y levanté el marco con la foto.

- ¿Tu familia?

- Si

- Que bonita, se ve que son muy unidos

- Si mucho

- Wow y tu esposa es hermosa

La dejé en su sitio, apoyé mis manos en el escritorio, él no pudo evitar ver como mis senos rebotaban y mirarlos con antojo.

- Yo soy soltera, pero no me molestan los hombres casados

- Disculpe, no entiendo muy bien qué quiere decir

- Pues que si le gusta lo que ve ¿no?

- Disculpe, no fue mi intención mirarla de esa forma

- Le gustan ¿no?

Las meneé y sonreí pícaramente, tirando los hombros hacia atrás.

- Si quiere las puede tocar

Suspiro, levantando su mano en dirección a ellos, arrepintiéndose a medio camino empuñando su mano descargándola sobre su escritorio.

- Creo que mejor no. No es buena idea mezclar negocios con placer

Volvió a mirar la foto, un tanto angustiado.

- No son cachos, si no me la metes

- Ay mujer --transpirando-- mejor dejemos esto en términos profesionales

Di la vuelta alrededor del escritorio, giré su silla para que quedara frente a mí y me apoyé en los reposabrazos quedando muy cerquita de su cara.

- ¿Cuándo te masturbas? ¿Lo cuentas como una infidelidad?

- No, obvio que no, porque no lo es

Me bajé la parte superior dejando el vestido en mi cintura, llevé la mano a la espalda soltando el brasier y lo dejé caer al suelo.

Mis senos estaban al desnudo y el frío del aire acondicionado hizo que mis pezones se endurecieran de inmediato. Los acaricia sensualmente con un poco de saliva y metía por debajo mis manos levantándolos en ofrecimiento hacia él y me miraba provocativamente, mordiéndose los labios.

- Siguiendo esa misma lógica, una paja con mis tetas, tampoco lo debería ser

Me hice de rodillas, le abrí el cinturón, el botón y cuando bajé el boxer su miembro quedó rebotando con una espectacular erección.

Mi boca de inmediato se llenó de saliva y apenas separe mis labios para acercarme, me agarró de las muñecas y se inclinó para mirarme a los ojos.

- Dijiste que una paja

Hice una mueca de decepción, pero igual no iba a desaprovechar. Me llené de saliva la mano y la pasé por su glande hasta verlo brillante. Mientras lo masturbaba un poco dejé caer abundante saliva entre mis senos.

Me apoyó en las rodillas y disimuladamente pasó mi cara por su miembro. Se ríe con picardía moviendo la cabeza un poco hacia los lados.

- ¿Te gustan?

- Desde la primera visita ¿eso lo hiciste de gusto? ¿cierto?

- No, pero me alegra que haya pasado

Tomé su miembro lo metí en medio y me deleité al darme cuenta que su longitud era perfecta para poder masturbarlo y mantener su cabeza por encima.

- Me gusta verlo mientras le doy cariño

Se agarró de los reposabrazos, apretándolos con fuerza dejando marcados sus dedos al ver como sacaba mi lengua casi a punto de tocar su miembro, pero lo único que dejaba era caer saliva en su diminuto agujero.

Apreté mis senos con los brazos mientras jugaba con mis dedos en su glande. Luego me acaricié los pezones abrí mis manos para agarrarlos y apreté su miembro.

- AGHHHH

Se le salió un deliciosos gemido que causó estragos en mi sexo, empapando mis tangas. Lo miré a los ojos y comencé a masturbarlo, apretando y moviendo mis senos más y más rápido.

Colocó sus manos en mis hombros moviendo su pelvis como si me estuviera penetrando una y otra vez. Sentía sus bolas golpear mi esternón.

Cerró los ojos y un potente chorro chocó contra mi mentón y cayó de vuelta sobre mis senos.

Él se tiró para atrás apretando su miembro tratando de aguantar no venirse más, pero al ver como esparcía su semen en mis senos. Abrí mi boca sacando la lengua y no pudo aguantar, terminó por apuntar con su mano a mi cara soltando otro chorro que cayó entre mi nariz y mi boca.

Me limpié con la mano, metiendo los dedos a mi boca y al sentir el delicioso sabor de su semen no aguanté más.

Le quite la mano de forma brusca y me abalance sobre su miembro chupando como un ternero hambriento. Él tampoco pudo evitarlo y terminó recogiendo una coleta con mi cabello e indicando la velocidad... hasta llenarme la boca.

- Ahhh mierdaaaaa ahghhh ghhhhh esto no podía pasar

Yo no paraba de mamar, quería más y más de su néctar. Me empujo de la frente para separarme y se comenzó a subir el pantalón a toda prisa, abrió uno de los cajones de su escritorio y sacó las llaves de su carro.

Yo seguía ahí de rodillas en el piso, sonriendo maldadosamente, saboreando y chupándome los dedos.

- El celador te acompaña hasta tu carro. Feliz noche

Trató de levantarse y lo empuje del pecho para que cayera sentado.

- Ey ey relax, no te vas a ir así ¿acaso no te gusto?

Trató de levantarse de nuevo sin responder y lo empujé de vuelta con un poco más de agresividad. Le coloqué una mano en el pecho y otra en su miembro que aún continuaba erecto.

- Respóndame y se puede ir

- Claro que me gusto, pero yo soy casado y esto es un error

- Yo no soy de las que habla, menos si me mantienen la boca ocupada --pasando mi lengua por los labios mirando su entrepierna--

- Esperanza, de verdad siento el malentendido, esto fue un error y espero que no se repita

- Yo sí... --me miró un poco escandalizado por mi sinceridad y atrevimiento-- me encanto tragármelo, sabia delicioso

- Ay mujer, no diga nada más

- Ya sabe que puede hacer para cerrarme la boca

Me reí con picardía y descaro, intentando abrir de nuevo su pantalón, pero él me tomó de las muñecas.

- Esta bien --alcé mis manos en el aire-- ya te puedes ir

- Gracias

Se levantó y desde el suelo lo mire como una sumisa esperando por el castigo de su amo.

- Eso sí, te lo advierto... esta propuesta es muy diferente al negocio que cerramos. No soy de más que espera, ni da períodos de prueba... o lo tomas o lo dejas

- Ya conoces la respuesta, feliz noche

Se levantó y cuando iba en la puerta se aferró al marco sin mirar atrás como si no estuviera aún seguro de lo que acababa de decir.

- Esposita no tiene por qué enterarse, no me interesa eso. Lo que ofrezco es ayudar a relajarte cuando estés muy estresado o cuando esposita no te atienda bien

- Ya conoce el camino de salida, el vigilante la acompaña a su estacionamiento

Salió de su oficina, rumbo al ascensor que no demoró en abrir, quedándome sola en su oficina. Me serví un trago de whiskey y me senté en su silla riendo maldadosamente mientras miraba la fotografía.

- Pobre esposita, le llegó competencia

Salí del edificio y fui directo a mi casa a darme una ducha caliente y tratar con la ayuda de alguno de mis amantes con batería bajarme la calentura.

Esa imagen que me había imaginado en medio de la sala de juntas fue de gran ayuda y sumarle como compañía a la mujer madura de mirada morbosa lo terminó de hacer perfecto.

---

Algo que he aprendido en venta y en la vida, es a no ofrecer disponibilidad total. A Erick lo mandé para la casa sin dejar de pensar en mí, si le hubiera dicho que lo esperaba cuando él quisiera, la historia habría sido otra.

No me habría llamado una semana después para vernos y esa noche si no les puedo decir que no fueron cachos. En realidad, fueron varios los que le salieron a esposita en esa habitación de motel.

Así que chicas y chicos, si quieren conquistar a alguien, no entreguen todo de inmediato, no se abran de par en par, dejen que sufran un poco porque si algo he aprendido en ventas es que no hay nada mejor para cerrar un negocio que la sensación de escasez.

Así es como hace 3 años, con una deliciosa paja rusa y una buena mamada conquisté a Erick. Si, soy la amante y no me molesta admitirlo.

Hay mujeres que nacen para formar una familia, yo tengo claro que nací para disfrutar la vida. La verdad no me molesta que siga con su esposa, mi idea no es que se separe y me proponga dejarla para estar juntos. No tengo interés alguno en reemplazarla.

Además, así él disfruta con su familia feliz que puede lucir orgullosos en público y a mí en privado me da y me hace me hace todo lo que con ella no puede y con eso soy feliz. Así conservo mi independencia y no tengo que atender por mucho tiempo a un hombre, ese papel lo hace perfectamente esposita.

Yo prefiero tenerlo así, de a raticos... intensos y explosivos.

---

Relato: Esperanza

Edición: Axel

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