Impotencia

El hombre golpeo la puerta nerviosamente y espero, la situación le resultaba muy incomoda. Pero mucho peor fue cuando finalmente la puerta se abrió y vio que lo recibía una hermosa mujer de unos 28 anos, de oscuro cabello enrulado salvajemente. Labios carnosos y unos agresivos ojos verdes. Y un físico de infarto.

- Buenas tardes

- dijo ella El se quedo sin palabras, no esperaba que su doctor fuera una mujer, y tan joven, y tan...

- Pase El hombre entro al consultorio y ella lo guió hacia la camilla.

- Siéntese por favor. Mi nombre es Romina

- Mucho gusto

- Cual es su edad?

- 66 años

- Desde cuando tiene usted problemas de impotencia sexual?

Avergonzado el hombre respondió:

- Desde hace un año

- En forma intermitente o permanente?

- Permanente...

- Según me adelanto por teléfono, UD. tiene problemas cardiacos

- Si tengo que cuidar no agitarme demasiado ni hacer excesivo esfuerzo físico.

- No se preocupe, mi tratamiento no involucra ningún medicamento. Pero debo advertirle que es algo no convencional y es probable que algunas partes del tratamiento le parezcan un poco embarazosas. Usted confíe en mi y hágame caso en todo lo que le diga.

- Ehh... esta bien

- Bueno, quítese la ropa y recuéstese sobre la camilla

El hombre obedeció dubitativo, se desvistió hasta quedar en calzoncillos. Romina se acerco y se los quito de un tirón sin darle tiempo a reaccionar. Ella se inclino sobre el y tomo el pene del viejo entre sus manos, empujo la piel hacia abajo haciendo que quede expuesto el glande, y empezó a tocarlo con la yema de sus dedos.

- Siente algo?

- S..Si

- Que siente?

- Mi corazón late mas rápido y...

- Por supuesto, lo que le estoy haciendo lo excita sexualmente y debería producirle una erección. Intentaremos incrementar la excitación hasta lograr una respuesta.

- No hay caso doctora, ya probé de todo.

- Usted déjeme a mi

Romina se agacho dándole la espalda al viejo y acercando su cara al pene. Esto hizo que el culo de Romina quedara mas cerca de la cara de el, en ese momento el viejo advirtió que el delantal blanco de Romina era inusualmente corto y ajustado, sintió su corazón acelerarse cuando pudo vislumbrar una pequeña bombacha verde bajo el delantal de la doctora. Ella continuo estimulando las partes mas sensibles del pene del viejo, que empezó a respirar un poco mas aceleradamente. sintió un cosquilleo en su entrepierna, una sensación que ya había olvidado.

- El próximo paso es utilizar algunos estímulos visuales Dicho esto la doctora levanto su ajustado delantal hasta la cintura, dejando expuesto su increíble culo solo cubierto con la bombacha verde que, ahora se daba cuenta, era transparente. El viejo no podía creer lo que que estaba viendo.

- Pero...

- atino a decir sin aliento Romina seguía estimulando las partes mas sensibles del pene del viejo con sus expertas manos. Esto le causaba a el espasmos y agitación pero no una erección.

- Todavía no hay respuesta

- dijo ella

- tendremos que intensificar los estímulos. Romina bajo su bombacha y tomo una de las manos del viejo y la ubico sobre su culo. empezó a hacerla mover en círculos. Con su otra mano siguió estimulando el pene del viejo, que no podía creer lo que estaba sucediendo.

- Aaaahhhhhh!

- gimió el viejo, sudoroso.

Romina había puesto el pene del viejo en su boca y estaba succionándolo suavemente, el viejo estaba completamente abrumado, no podía creer lo que estaba sucediendo.

- Que... que hace!!! aaaahhhhhh! Ella continuaba. El pene del viejo empezó a crecer. Entonces Romina se detuvo y volvió a subirse la bombacha.

- Muy bien, siguiente etapa... Romina se subió a horcajadas encima del viejo y se sentó sobre su miembro, que quedo aprisionado entre la bombacha de ella y el estomago del viejo. Ella empezó a moverse sobre el, refregando su entrepierna contra el pene del viejo. A los pocos segundos se encontraba totalmente erecto.

- Ahhh!... por dios

- gimió el viejo agitadamente

- Vio como en poco tiempo lo hicimos funcionar?. Avíseme si en un momento siente que va a eyacular, porque en su condición cardiaca eso podría ser riesgoso. Romina desabrocho los botones de su delantal y dejo expuestos sus pechos.

- Pe... pero que hace? dijo el viejo, abrumado por Ella

- Estoy incrementando la excitación, avíseme cuando se encuentre al borde del orgasmo. Ella continuaba frotándose contra el pene del viejo, que respiraba agitado. Tomo la mano del viejo y la poso sobre sus pechos y lo obligo a acariciarlos. El viejo sintió los primeros indicios de un orgasmo explosivo.

- ahhhh!, estoy cerca! Ella continuo frotándose intensamente contra el miembro pulsante del viejo mientras lo obligaba a acariciarle sus pechos perfectos.

- ahhhh! basta por favor no aguanto mas! voy a eyacular!

- gimió el viejo casi sin aliento. Romina se detuvo justo cuando el viejo estaba por estallar y salió de encima de el.

- Vio que lo único que hacia falta eran los estímulos necesarios?

El viejo no podía responder, estaba recuperándose. Romina lo había abrumado y su corazón golpeaba contra el pecho. Romina tomo el brazo derecho del viejo y lo ato a la camilla con un robusto grillete de abrojo.

- Que es esto?

- Es la segunda parte del tratamiento, UD. obedézcame

- dijo ella mientras amarraba el brazo izquierdo.

El viejo, que ahora estaba inmovilizado, vio estupefacto como Romina se quitaba el delantal, quedando solo con sus zapatos y la tanga verde. El viejo respiraba agitado, ella lo había excitado mucho y verla así no lo ayudaba a relajarse. Romina se subió encima del viejo dándole la espalda, se agacho, haciendo que su increíble culo quedara a centímetros de la cara del viejo.

- Aaaaaaahhhhhh!!!

- gimió el viejo Romina estaba succionando agresivamente el pene del viejo, mientras masajeaba sus testículos con una mano y masajeaba el pene con la otra. El viejo jadeaba entrecortadamente, Romina succionaba con una fuerza increíble. El no podía juntar aire para hablar. Romina continuaba sin dar tregua al viejo, que empezó a sentir nuevamente los espasmos del orgasmo.

- Ya estoy cerca.... Romina continuaba succionando, focalizándose en la punta del pene. El viejo se esforzaba por demorar su orgasmo lo máximo posible, pero no lo lograba.

- Basta! no puedo mas!!! Romina acelero el ritmo de sus estímulos.

- Aaaahhhh! voy a eyacular!!! no puedo aguantarlo!, basta!!! Romina continuo sin piedad estimulando el pene del viejo, que empezó a arquearse convulsivamente.

- AAAAAAAAHHHHHHHHHH! Un primer violento chorro de semen lleno la boca de Romina, que lo trago sin dificultad sin abandonar la felacion. El viejo intento controlarse y detener el orgasmo, pero Romina acelero el ritmo de su mano y apoyo su lengua justo debajo de la punta del pene del viejo.

El viejo volvió a arquearse espasmódicamente mientras un segundo chorro de semen, mas violento que el anterior, empapo la boca de ella, que volvió a poner el miembro en su boca y succionando, causando que el viejo siguiera expulsando semen en chorros cada vez mas débiles hasta quedar completamente exhausto.

Romina se incorporo y volvió a ponerse el delantal. Sonrió maliciosamente al viejo.

- Al final lo único que hacia falta era una mujer que supiera excitarlo, creo que acabamos con su impotencia, no? El viejo respiraba agitadamente, su corazón estaba latiendo fuertemente y estaba cubierto de sudor.

- S...santo dios! que acaba de pasar?

- Realmente necesita que se lo explique?

- Desáteme...

- El tratamiento no termino todavía... Romina levanto su delantal y lentamente se quito la bombacha.

- Que esta haciendo?

- Tenemos que causar una nueva erección

- Esta loca? estoy exhausto... no puedo

- Ya veremos...

Ella se subió encima del viejo, cuyo miembro todavía estaba semierecto y apoyado sobre su estomago. Se sentó encima del pene, aprisionándolo contra su vagina. El viejo emitió un gemido.

- Se siente bien? Romina empezó a mover rítmicamente su pelvis, refregándose contra el miembro del viejo. Sentir la vagina de ella rozando tan fuertemente contra su pene lo enloquecía. El miembro empezó a crecer nuevamente. Romina lo noto y sonrió.

- Parece que estaba muy necesitado, señor... El viejo no se sentía bien, le faltaba el aire y su corazón le estaba empezando a doler. Pero el violento orgasmo lo había dejado muy débil como para resistirse. No podía y no quería resistirse.

Romina estiro su mano y tomo el miembro casi totalmente erecto y lo dirigió hacia su entrepierna.

- Hoy es su día de suerte. Ella bajo su pelvis y lentamente hizo entrar el pene del viejo en su vagina.

- Aaaaaaahhhhh!

- gimió el viejo Romina empezó a moverse sobre el viejo. Atrás y adelante una y otra vez. El placer que sentía el viejo era extremo, sentía en su pene el calor húmedo de Romina. En pocos segundos el viejo estaba completamente erecto otra vez.

Ella acelero un poco el ritmo y comenzó a hacer movimientos circulares con su pelvis.

- Aaaaahhhh!

- gimió el viejo

- no me siento bien! me cuesta respirar! deténgase por favor!... que esta haciendo!!?? por que hace esto?

Romina se estremeció de placer al sentir el poder que tenia sobre el viejo, al ver que ella podía excitarlo en contra de su voluntad, al sentir que tenia la vida del viejo en sus manos y que su arma mas 'mortífera era la lujuria. Ella detuvo sus movimientos pélvicos por unos segundos y observo al viejo, que estaba respirando agitadamente y empapado de sudor.

- por f... favor no... no puedo excitarme tanto... mi corazón...

Romina desabrocho los primeros botones de su delantal dejando expuestos nuevamente sus firmes pechos, se agacho y tomando la cabeza del viejo la apretó contra sus tetas. El viejo gimió de lujuria. Ella comenzó nuevamente a moverse arriba y abajo sin dejar de ahogar al viejo con sus pechos. Ella despiadadamente estimulaba al máximo el pene del viejo con los músculos de su vagina. El viejo empezó a sentir desesperación ya que casi no podía respirar y se encontraba nuevamente al borde del orgasmo. Intento liberarse de las ataduras de sus brazos, utilizo todas las fuerzas que le quedaban hasta que la atadura de su brazo derecho empezó a aflojarse, el viejo comenzó a dar desesperados tirones utilizando las ultimas fuerzas en su ser hasta que la atadura se abrió y su brazo quedo libre, el viejo sintió una ráfaga de alivio. Pero su brazo en seguida fue tomado por el brazo izquierdo de Romina, que se incorporo nuevamente al ver lo que el viejo intentaba hacer: quería desatar su otra mano, pero ella lo detenía. El viejo utilizo toda su fuerza y Romina sonrió.

- UD. no tiene fuerza si yo logro que su sangre fluya hacia otro músculo.

Entonces ella comenzó a moverse sobre el pene del viejo subiendo y bajando y haciendo círculos. El viejo gimió.

- Basta por favor basta!!!

- Usted decide cuando esto se termina, simplemente deje de estar excitado. Ella comenzó a moverse mas rítmicamente, cabalgando el miembro del viejo, que ya no pudo seguir resistiendo con su brazo. El orgasmo era incipiente otra vez. Romina lo siguió montando sin piedad hasta que el viejo empezó a convulsionarse. Entonces ella hizo salir el pene de su vagina y tomándolo con su mano derecha empezó a refregarlo contra su culo, moviéndolo rítmicamente. El viejo gimió pálidamente y disparo un nuevo chorro de semen. Ella continuo masajeando el miembro del viejo contra su culo mientras el seguía expulsando esperma convulsivamente. Una ver finalizado el orgasmo el viejo quedo en estado deplorable. Empapado de sudor jadeando sin aliento, ahogándose.

- S.... santo... no p... me siento bien... mi corazón... esto es peligroso.

- No se preocupe, soy doctora, usted confíe en mi y estará bien Romina lo desato de la camilla.

- Acomódese que enseguida vuelvo. Romina salió de la habitación. El viejo casi no tenia fuerzas para moverse, lentamente se levanto y comenzó a vestirse, busco sus pastillas cardiacas porque la doctora lo había hecho cruzar la línea y no podía recuperarse.

Entonces reapareció Romina y lo que vio el viejo le corto el alieno. Ella estaba vestida solamente con un sensual consjunto de portaligas y medias mas una pequeña bombacha. Antes que el pudiera reaccionar ella lo empujo y lo obligo a sentarse en un sillón. El viejo intento ponerse de pie pero estaba agotado y Romina tenia mas fuerza que el en ese estado.

Sin pronunciar palabra, ella se arrodillo frente al viejo y bajo el cierre de sus pantalones, con sus suaves manos tomo el miembro del viejo y lo hizo salir hacia afuera. Comenzó a estimularlo lentamente.

- Doctora... no me siento bien... mi corazón no da mas

- Usted confíe en mi y no se preocupe, esta vez solamente necesito inspeccionar su grado de sensibilidad en el pene, pero bajo ningún concepto tiene usted que eyacular porque eso podría ser riesgoso en su condición. Romina masturbaba el pene del viejo con un poco mas de firmeza y este empezó a crecer y endurecerse otra vez, el viejo respiraba con pequeños gemidos. Entonces ella acerco sus pechos y puso el pene del viejo entre sus tetas. Apretándolas con sus manos para aprisionar el pene del viejo ella comenzó a moverse arriba y abajo. Esto era mas de lo que el viejo podía soportar, Romina lo excitaba mucho y no podía controlar sus reacciones. En viejo intento detenerla pero no podía, ella le causaba convulsiones con sus movimientos. El viejo sintió nuevamente el orgasmo cerca.

- Basta, doctora, voy a eyacular!

Ella a se detuvo.

- Necesito que se esfuerzo en evitar el orgasmo, solamente un poco mas y habremos curado su impotencia. Dicho esto ella comenzó a chupar el miembro del viejo con su boca, subiendo y bajando lentamente.

- ahhh! por dios! estoy al borde!. me cuesta mucho esfuerzo evitar...

- No importa el esfuerzo que tenga que hacer, usted no debe eyacular. Eso podría matarlo. Solo falta un poco mas. Romina acelero el ritmo de su fellatio y el viejo respondió con gemidos. El estaba haciendo un gran esfuerzo por evitar el orgasmo. En ese momento sintió un punzante dolor en su pecho.

-AAahhhh! mi corazón... necesito mis pastillas! deténgase! Romina se detuvo. Entonces chupo su propio dedo anular y lentamente lo introdujo en el ano del viejo que se arqueo convulsivamente

- Que esta haciendo.

- Estoy estimulando su próstata, de esta forma lo voy a obligar a eyacular, no hay manera de que usted lo evite. El viejo miro aterrorizado a Romina, que le clavo sus ojos azules con una mirada maliciosa.

Entonces ella volvió a succionar el pene del viejo sin dejar de mover su dedo. El viejo sintió un espasmo violento, ya no podía controlar su propio cuerpo. Expulsó un chorro de semen, y luego otro. Romina no se detenía y lo tragaba rápidamente. El viejo siguió arqueándose y eyaculando hasta que ya no tenia oxigeno, su corazón, exhausto, dejo de latir. Romina lo miro asombrada, ella había matado al viejo, y utilizando sexo. La sensación de poder que eso le causaba era indescriptible. Cuando el viejo la había llamado para atenderse y le había explicado su condición cardiaca, ella había decidido que iba a jugar un poco con el y sus debilidades. Por eso prefirió citarlo en su casa, para poder tenerlo a su merced. Romina llamo a una ambulancia, mas tarde explico a la policía que ella y el hombre fallecido eran amantes desde hacían varios meses y que el había tenido un ataque cardiaco mientras tenían sexo. La policía creyó su versión y la reputación post mortem del viejo quedo arruinada.