Entre-cruzados

BETA PÚBLICA

Nota: Puede cambiar el tamaño de la fuente, el tipo de fuente y activar el modo oscuro haciendo clic en la pestaña del ícono "A" en el Cuadro de información de la historia.

Puede volver temporalmente a una experiencia Classic Literotica® durante nuestras pruebas Beta públicas en curso. Considere dejar comentarios sobre los problemas que experimenta o sugerir mejoras.

Haga clic aquí

- ¡Acaba con ella!

La tomé de la mano, me acosté sobre una de los parasoles boca arriba y la hice acomodar a ella encima en sentido contrario. Alguna vez imaginé que cuando eso pasara lo iba a dudar, pero ni me lo pensé, agarré sus caderas y empuje su sexo contra mi boca saboreando su humedad, escuchar sus gemidos y sentir como ella se hundía en la mía.

Vi las piernas de mi novio acercarse por detrás, saque mi boca para llenar de saliva el preservativo y luego pude ver con todo lujo de detalles como sus labios externos se separaban y su miembro se abría paso en su interior, lo empezó a hacer despacio y ella misma movía su cuerpo y caderas de forma desesperada para que lo hiciera más rápido y fuerte.

No era capaz de seguir con mi boca su cuerpo, su sexo se me escapaba al ir y venir, así que saque mi lengua y deje que la punta rosara su clitoris. El miembro de mi novio comenzó a empaparse en sus jugos, gotas caían en sus bolas y yo las chupaba como si se tratara de un elixir, beber un orgasmo de esa manera puede ser bastante adictivo.

Sofi levantó un poco su cuerpo al no poder dominar más su boca y su lengua, los gemidos no la dejaban darme placer. Mientras nos cabalgaba, me apretaba los senos y me apretaba el clítoris con su dedo pulgar y anular hasta exponerlo, dejaba caer abundante saliva y arremetía contra el dándole pequeños golpecitos con su índice.

Fede al ver lo maldadosa que era, dejó caer saliva desde lo alto y comenzó a acariciar su asterisco. Ella volteó a mirarlo casi endemoniada, tomó su miembro se lo sacó y lo colocó detrás.

- ¡Duro! ¡Me gusta duro y que dure! ¿seguro que guantas?

Pobrecita, no sabía lo que estaba pidiendo, si algo me encantaba de Fede en el sexo era su autocontrol y si le daba la gana te podía follar por horas sin venirse.

Él le sonrío de forma despectiva, la agarró del cabello y la levantó hasta quedar cerca.

- A mí me gusta que las perras se lo traguen haciendo bizcos

- Bueno --levantó una ceja-- entonces tenemos un trato

La dejó caer sobre mí, se agarró de sus caderas y de un solo empujón se lo metió directo hasta el fondo.

- ¡Ay jueppuuu.... --se mordió la boca--

- Dijiste duro --le replicó Fede--

- Yo no dije que pararas

Su sexo se estremecía en cada penetración, se abría y cerraba de placer, nunca pensé que se fuera a ver así mientras te dan por el culo. Ella a duras penas descargaba su cara en mi sexo sin poderme hacer nada y para aguantar sin gritar me mordía los muslos. Quería terminarla de enloquecer, ni se como es que llegue a pensar querer sentir lo que siente un hombre cuando uno se viene, la tome de las caderas empujándola hacia abajo penetrándola con mi nariz mientras que envolvía su clítoris en mi lengua.

Me mordió tan duro que hasta me hizo gritar, pero apenas me acostumbré al dolor, continué con mi misión. Ella se levantó apoyando sus manos en mis crestas iliacas, cabalgándonos con todas las fuerzas que le quedaban, sentí una pequeña succión en mi nariz, luego un leve temblor continúo seguido de una explosión de fluidos que se me metieron por la nariz haciendo que me ahogara. Poco le importó que no pudiera respirar, no se detuvo hasta sacar el último orgasmo que le quedaba en su cuerpo.

Se bajó tambaleándose, le arrancó el preservativo con algo de rabia y se le hizo de rodillas abriendo la boca. Mientras yo trataba de recuperarme veía como él la empujaba desde atrás para que ella se atragantara con su miembro y torciera sus ojos como se lo había prometido.

Ella misma colocaba su mano detrás de la de él, pidiendo que no se limitará, hasta que logró meterlo por completo y la verdad es que dejó sorprendida con tal habilidad. Una vez alcanzado ese punto ella misma le quitó las manos, se agarraba de sus piernas, lo sacaba y volvía a meter hasta desaparecer e inclusive ser tan descarada de usar su lengua para acariciar sus bolas y reír como una diabla.

Él tuvo que darse por vencido y le concedió la victoria. Ella lo sacó abrió la boca y lo masturbo esperando su leche. Apenas obtuvo lo que quería se lo metió un par de veces más hasta la garganta mirándolo fijo para regalarle esa mirada perdida que tanto le excitaba.

La lluvia había menguado. Todos satisfechos, subimos con calma las escalas para evitar resbalarnos, antes de entrar a la habitación me empujó contra una pared y me dio tremendo beso.

- Desde que te vi, sabía que nos íbamos a divertir

- Pues, que sea la primera de muchas

- Eso espero

Entramos a la habitación sin hacer ruido, algunos de ellos ya estaban roncando. Nos acostamos a dormir y caímos rendidos enseguida.

---

Ya se escuchaba movimiento en la cocina y dos de las camas estaban desocupadas. Lo primero que hice al levantarme fue revisar mis muslos y los tenía llenos de morados y marcas de sus dientes.

Sonreía como una idiota recordando tantas locuras que habían sucedido la noche anterior, aun ni me lo podia creer. Busqué un pantalón largo para cubrir las marcas y desperté a mi novio con un gran beso.

El ambiente estaba como raro, las chicas estaban preparando el desayuno mientras que sus esposos estaban sentados esperando en la mesa, pero pegados de sus teléfonos como evitando hablar.

Dimos los buenos días, pero ellas aún más serías y secas nos dijeron que no esperamos en la mesa.

Creo que estaban pensando que nosotros íbamos a arruinar su secreto o no sé si se molestaron porque después también nos divertimos con Sofi.

Y hablando del rey de Roma, fue la última en levantarse, con una sonrisa de oreja a oreja, audífonos en sus oídos tarareando una canción y hasta meneando el cuerpo.

Dio los buenos días, se sirvió una taza de café y mientras le daba unos sorbos cantaba con gracia.

"y que se le moja la canoa

y que se le moja la canoa

pobre hombre cuando se emborracha"

Los dos esposos bajaron la cabeza como si no fuera con ellos, pero los delataba lo rojos que estaban. Ahora todo empezaba a tener sentido. Sandra corrió hasta donde Sofía empujándola y haciéndola caer de la silla, la taza de café cayó a un lado estrellándose contra el suelo de forma violenta.

- ¡Ey que te pasa!

- A mí me respetas

- ¿HP ya que te hice?

- No sé, decime ¿por qué este par ni son capaz de mirarse, que les hiciste?

- Pregúnteles a ellos

- Amor yo no... es que bebimos mucho y... --contestó el esposo de Sandra con miedo--

- ¿Como así Jose? --se le salieron las lágrimas--!JOSE! ¡MALDITO HP!

Se le tiró encima a darle golpes y Lucia intervino para quitársela de encima mientras miraba con decepción a su esposo.

- De verdad no lo puedo creer

Los cuatro empezaron a alegar y volaban artículos de cocina en dirección a ellos. Nosotros nos levantamos sin llamar mucho la atención, empacamos lo más rápido que pudimos.

- ¡MALDITO MARICA!

Tas tas tas tas, seguían sonando ollas caer y platos romperse.

A los segundos se nos unió Sofi con tremenda risa de maldad a empacar lo que alcanzaba a coger.

Nos montamos al carro y cuando íbamos a arrancar, se nos atravesó Sandra al frente con una cara de demente que hasta daba miedo, cuando abrieron la puerta de atrás juraba que iban a bajar del pelo a Sofia y revolcarla entre las dos, pero lo único que hicieron fue subirse con lágrimas en los ojos.

- Por favor no nos dejen aca

- ¡Vámonos! --dijo la otra--

Arrancamos a toda prisa dejando una nube de polvo atrás hasta encontrar la salida hasta la carretera pavimentada.

-!¡Paren, porfa paren!

Fede freno en seco pensando que iba a vomitar.

Sandra abrió la puerta se bajó de un brinco pegó un grito de desahogo y se empezó a reír como una loca.

- ¡Hijueeepuutaaa! ¡por fin! ¡somos LiBRES!

Lucia y Sofia empezaron a reír también, nosotros seguíamos sin entender ni mu de lo que estaba pasando.

- ¡Vámonos!

Se volvió a subir como si nada y nosotros dos nos quedamos pasmados.

- Ya, vámonos. Vámonos antes de que aparezcan --mirando hacia la carretera destapada--

- ¿Aparezcan? --preguntó Fede-- ¿acaso corremos peligro?

- Usted arranque papacito --le dijo Sofi levantándose a darle un beso-- en un rato les explicamos

Fede hizo caso, arrancó a lo que más le daba. Le dieron indicaciones para tomar una vía más larga de regreso a la ciudad para que ellos no nos fueran a seguir, todo parte del plan.

Nos detuvimos más adelante en un estadero. Pedimos algo de comer y nos sentamos lo más alejado que pudimos de los demás. Nos quedamos de una sola pieza al escuchar tremenda novela.

---

En la pandemia empezaron a sospechar que entre ellos dos había algo. No tenían nada en contra de los gais pues como ya sabíamos ellas también lo eran. Lo que les molestaba era que lo mantuvieran en secreto sabiendo que estaban casados, sino hasta habrían estado de acuerdo en pasar bueno los cuatro.

Este plan lo habían armado desde hace rato, esperando que quitaran las restricciones de salida para poder ejecutarlo. Aprovecharon que nosotros dos íbamos a ir generando un factor de distracción adicional y esa misma noche le contaron todo a Sofi que de inmediato se unió al plan convirtiéndose en su arma más poderosa.

Todo el tiempo estuvieron actuando, las pintas sexys de Sofi, el mini matador vestido de baño, las miradas, los shows de celos y hasta emborracharlos para dejarlos solos con ella y "hacerlos caer".

Lo único que no podía controlar era cómo íbamos a actuar nosotros, pero confiaban en que como nos habíamos comportado de forma tan respetuosa en el GYM inclusive con la desnudez, no nos íbamos a entrometer demasiado.

Mientras nosotros nos estábamos divirtiendo con ellas en la cabaña, Sofi estaba moviendo las últimas fichas para ponerlos en jaque.

- Esa me la van a pagar triple, mamacitas --dijo Sofi entre risas--

Se dejó meter mano por todos lados, los besó y hasta masturbó. Luego jugaron a besarse con uno y con otro, hasta que los hizo estar cerquita y no se aguantaron, se pegaron tremenda chupeteada y las manos tampoco es que se quedaran quietas, inclusive hasta Sofi parecía sobrar.

Estaban tan borrachos que ni se dieron cuenta que ella estaba filmando como se comían a besos y como el esposo de Sandra se hacía de rodillas a hacerle un oral al de Lucia. La prueba reina para poder pedir el divorcio y llevarse las de ganar en el pleito legal.

El cierre fue la actuación de la mañana, con pelea incluida para que ellos mismos se delataran y les pudieran hacer un jaque mate que ni se esperaban.

- Se los juro, que no sospeche ni un poco de eso --me sentía una ingenua--

- Y el premio a la mejor actriz revelación es para --dijo Sandra entre risas-- Sofi

Se levantó de la mesa, se puso delante de nosotros, hizo una venia y todos le aplaudimos.

- ¿Y ahora qué? --preguntó Fede--

- Ahora nada, se suponía que teníamos un puente entero para ejecutar el plan y todo salió mejor de lo que esperábamos --dijo Sandra--

- No se ustedes, pero yo no pienso regresar hasta el lunes. Ahora que estoy soltera --Lucia se sentó de espaldas sobre Fede-- tengo ganas de divertirme... y anoche me dejaron un poquito antojada --refregando su gran trasero sobre su miembro--

- Si --Sandra se sentó en las mías-- creo que podríamos buscar un lugar donde quedarnos y compensarlos por todo lo que los hicimos pasar --metiéndome su lengua a mi boca dejándome atónita con un excitante y candente beso--

- Pues, donde ella vaya --dijo Sofi señalándome- voy yo

- ¿Yo? --con carita de maldad-- yo voy donde esté la locura

- Yo soy la reina de los locos

Sofi muerta de risa nos hizo una mueca torciendo sus ojos y todos nos soltamos a reír.

No me disgustaba la idea de que Lucia la quisiera pasar bien con mi novio, ni que Sandra se les uniera. Igual ya estaba pensando como pedirles que me ayudaran a distraerlo para poder hacer lo mío a solas con Sofi, tal y como me lo había deseado, lo de la noche anterior no tenía comparación, pero igual quería saber que se sentía estar sola con una mujer y tenía claro que "ella" era la que quería.

Nos montamos a la camioneta, buscamos una finca para alquilar por Airbnb. Paramos en un pueblo pequeño para comprar suministros y mucho licor.

Tuvimos un resto de fin de semana brutal haciendo cosas que nunca imagine, cosas que ni Fede ni yo vamos a olvidar... pero esa, es otra historia.

---

Relato: Melina

Escrito: Agata

Edición: Axel

Por favor califica esto historia
El autor agradecería tus comentarios.
  • COMENTARIOS
Anonymous
Our Comments Policy is available in the Lit FAQ
Postear como:
Comparte esta Historia

LEER MÁS DE ESTA SERIE

El Sr. Perfecto Parte Anterior
Entre Fantasía & Realidad Información de la Serie

SIMILARES Historias

Cayendo En Mi Propia Trampa A puertas del divorcio, encontramos como revivir la llama.
Libres en la Oscuridad [05] [FINAL] Cómplices en las Sombras [FINAL].
Cum as You Are Now A romance with a twist or two and a long-held secret.
Fresh Meat Pt. 01: The Pledge The last ritual for joining the Fraternity.
Más Historias