Nota: Puede cambiar el tamaño de la fuente, el tipo de fuente y activar el modo oscuro haciendo clic en la pestaña del ícono "A" en el Cuadro de información de la historia.
Puede volver temporalmente a una experiencia Classic Literotica® durante nuestras pruebas Beta públicas en curso. Considere dejar comentarios sobre los problemas que experimenta o sugerir mejoras.
Haga clic aquí--Hostia, tío, que cabronazo eres... --dijo ella, casi rendida--. Ufff... No me apetece nada, pero creo que te la voy a relamer por lo bien que me has caído...
Pero la cosa se torció antes de que se terminara de arrodillar.
Porque unos golpes en la puerta nos sobrecogieron, devolviéndonos a la realidad. ¡Joder, nos habíamos olvidado de que estábamos en el baño de los tíos! Y los tíos que bebemos en un bar solemos mear de la hostia.
Eva me soltó de repente y se echó a un lado, ocultándose detrás de mí.
--Dile que está ocupado... --me susurró, esta vez con cara de susto.
--¡Ocupado, tío! --dije con la voz más bronca que conseguí poner.
--Joder, capullo, date prisa, que llevas ahí un montón de tiempo. ¡A cascártela a tu casa|
--Que no, coño, que estoy cagando...
Nos partimos de la risa, cada uno en un rincón del cubículo, y callamos para dejar pasar la tormenta. Unos segundos más tarde, las voces en el exterior desaparecieron y aproveché para salir y cubrirla a ella.
Cuando ya no hubo peligro, le hice una seña y Eva salió a la carrera hacia el baño de las chicas.
Continuará...